GRABANDO EN CASA

¿Home Studio o estudio de grabación? Ésto es lo que nos plantea el productor y CEO del sello digital Pampa Records a la hora de encarar una grabación que derivará en las plataformas de streaming, mencionando además algunos de los softs disponibles para guitarras, cuerdas y baterías.

En las décadas del ‘90 o 2000, donde las producciones tenían a la guitarra eléctrica como protagonista, era impensado ser parte de la industria de la música, si no se pasaba por un estudio de grabación físico analógico. ¡Y mientras más canales tuviera la consola de mezclas, mejor!
El poder de Internet y la accesibilidad a herramientas digitales de producción musical, sumado a los períodos de encierro en pandemia, hicieron que empezara a tomar forma la idea de producir en casa. Los home studios para realizar demos o maquetas, pasaron a ser actores principales en la industria, dando lugar a los llamados -peyorativamente agregaría yo- “bedroom producers”, por tener estudios de grabación armados en sus dormitorios. El punto de ebullición fue el Grammy que recibió Finneas Baird O'Connell en 2020, por producir un álbum grabado justamente en su dormitorio.

No voy a cometer el error de discutir qué sonido es mejor, si el analógico de estudio de grabación, o el digital de una placa de audio de u$s 160. Sólo pienso en voz alta que estilos de nuevas tendencias como el trap, hip hop, rap, etc. no necesitan pasar por un estudio de grabación físico, ya que prácticamente no tienen instrumentos reales.

Podría estar todo el día mencionando marcas, prestaciones y utilidades, pero este informe no se trata de plug ins, sino de empezar a tomar como opción seria y de bajo presupuesto las grabaciones en un home studio. Está demás decir que para sacar el máximo provecho a una producción “fatto in casa”, debemos tener preparación y entrenamiento en estudios físicos. No lograremos jamás un sonido profesional en nuestra notebook, si no tenemos noción de audio, medidas, y cómo afecta a un micrófono condenser la presion del aire, por decir algo…
Nunca vamos a poder comparar el sonido analógico con el digital, pero si tenemos en cuenta que el final de la cadena es Spotify, y que dependemos de la calidad del celular en donde reproducimos nuestras canciones, creo que debemos plantearnos como opción este nuevo paradigma.

No quiero cerrar la nota sin una reflexión que apunte a lo práctico. Si analizamos un proyecto musical desde lo viable, creo que tiene mucho sentido lograr la más alta calidad de grabación a un costo bajo de producción, sobre todo, teniendo en cuenta que es muy difícil recuperar la inversión a través de descargas o streaming. Entonces, ¿por qué grabaríamos en un estudio físico con valores de jornada, pudiendo grabar en nuestra casa o sala de ensayo propia?

Oscar Irustia
Instagram.com/oscarirustia

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